Sobre la serie

Effymine es una serie escrita a modo de crónica íntima. La primera temporada (existencialista) duró 22 entregas. La segunda (realista) 20. Esta página y producción es parte del BlogArte de Effýmia: effymia.blogspot.com

miércoles, 13 de enero de 2010

the F-side

Cuando estaba en la primaria, y aún tratando no podía conectarme socialmente con nadie de mi grado, en los recreos solía sentarme en las escaleras y mirar la luz. Un día me acuerdo, anoté en el pizarrón del aula: "hoy no hablo." Me sumí en el silencio. Ahora puedo entender que ese día estaba gritando. Las palabras en el pizarrón eran sólo una invitación a que me molesten, a que me hagan hablar, a que me busquen. No lo logré.

En entregas anteriores: En este mundo, divido y multiplicado, con mundos internos, y relaciones complejas, y conceptos errados, una mujer se transformó en su propio secreto. // Sabe lo terrible, el peligro. // Elizabeth quiere vivir finales mejores. // Inició un proceso, iniciará una carrera. // "Debo olvidarlo, debo renunciar antes de lo previsto." //  Va a dejar de ver al Señor H. 

Hoy, Entrega nº17: Puntos infinitos... (the F-side)

Renunciar a un trabajo para evitar seguir viendo a una persona puede ser comprendido como algo infantil, así como cualquier acto que pueda interpretarse como una huída. Elizabeth tenía decidido esperar el momento oportuno para mencionar su retiro, y mientras uno de sus jefes pensaba que la razón de su improvisada partida está relacionada con los estudios que va a iniciar, Elizabeth no podía encontrar las palabras para explicar dónde radica realmente su problema. "Sé que suena tonto, pero tengo miedo." dijo, y el jefe le ofreció cambiar los horarios para que tenga tiempo para estudiar. "Voy a pensarlo." repuso.
¿A qué teme Elizabeth? "Quiero hacer lo correcto." se repite una y otra vez.
¿Qué es lo correcto? Un mismo hecho puede parecer la respuesta si se analiza la situación desde un solo lado. Del lado de Elizabeth, dejar de ver al Sr H es una medida preventiva para no enloquecer en el silencio, y para ello debe renunciar. Del lado del mundo, dejar el trabajo sin explicar lo que sucede, es ilógico, injusto y hasta idiota. ¿Cómo será del lado de su jefe? ¿Qué sería lo correcto del lado del Sr H.? Elizabeth quisiera poder estar dentro de aquellas cabezas, y que ellos también entren en la suya, y ya no habría lo qué hablar. Las palabras serían innecesarias en un mundo de total conocimiento. Si tan sólo no existieran los lados... seguro la vida perdería interés, pero todo sería tan simple... ¡y este lado es tan solitario! ¿Serán todos los lados tan solitarios?
¿Qué vas a hacer, Elizabeth?¿Vas a decirle que lo amas?¿Vas a dejar el trabajo?¿Vas a olvidarte de lo que sentís?¿Vas a asomar tu cabeza y tratar de no analizar todo sólo desde ese lado donde estás tan sola, donde pensás que lo único que merecés es continuar sola? Aún tenés tiempo, aún hay tiempo.
Tus jefes confían en vos, o eso dicen. Tus padres te quieren, o eso dicen. Y hasta que el mundo no sea de total conocimiento, más vale que lo sigan diciendo, porque las palabras son lo único que podemos conocer de aquellos lados donde no estamos. Elizabeth, hablá!

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